Románico Atlántico toma el pulso a la catedral de Ciudad Rodrigo
Atendiendo al objetivo de facilitar la conservación y la gestión inteligente de los edificios en los que se interviene, el Plan Románico Atlántico ha iniciado la monitorización de la catedral de la localidad salmantina de Ciudad Rodrigo. El edificio será junto a las iglesias de San Pedro de la Nave y San Martín de Castañeda en Zamora y a la de San Martín en Salamanca, uno de los puntos estratégicos desde el que articular la dinamización y difusión del patrimonio del territorio Románico Atlántico. Un proyecto de colaboración transfronteriza para la conservación del patrimonio cultural en el que participan la Junta de Castilla y León, la Fundación Iberdrola España, el Ministerio de Cultura de Portugal y la Fundación Santa María la Real del Patrimonio Histórico.
Disponer de datos objetivos que permitan conocer el estado en el que se encuentra la catedral de Ciudad Rodrigo. Éste es el primer objetivo del equipo del Plan de Intervención Románico Atlántico, promovido por la Junta de Castilla y León e Iberdrola, en colaboración con la Fundación Santa María la Real del Patrimonio Histórico. Para alcanzar esta meta, se ha iniciado la monitorización del espacio, mediante la colocación de 35 nodos con sensores, que ubicados en diferentes puntos del templo vigilan sus condiciones de temperatura, humedad, luminosidad u otros aspectos como la presencia de xilófagos que puedan afectar a la conservación de los bienes muebles. Los datos que vayan arrojando los sensores, permitirán un mejor conocimiento del comportamiento higrotérmico del edificio y facilitarán su mantenimiento, conservación y gestión. Así, por ejemplo, la monitorización incide en diagnosticar las humedades detectadas en el pavimento del interior de la catedral, que lo deterioran, dificultando el tránsito de fieles y visitantes. La información reunida, junto a la obtenida en investigaciones precedentes realizadas en el templo, servirá para adecuar las futuras intervenciones a las necesidades reales del edificio, de tal manera que se puedan planificar y se anticipen a la aparición de daños.